Casado, padre, de unos cincuenta años, Alain Lesec ocupa desde hace quince años el local número 526 del Instituto internacional de estudios antropológicos interdisciplinarios. Cada lunes, da clases sobre « el estudio comparado de los modos de vida en Europa central y oriental antes y después de la caída del comunismo » en la Escuela superior de las profesiones del turismo. Y cada lunes, desde hace tres años, Alain se cruza con Odile, la documentalista de la escuela. Desde su primer encuentro, está cautivado por esta mujer más joven que él y tan guapa. Distraído, tímido, la conoce poco a poco, descubre que le gusta la música clásica – a él no le gusta – y que vive una vida independiente – no él. Cierto día – mientras su esposa está en Grecia para un viaje de estudios que suele realizar cada año - Alain, en un arranque de temeridad que no parece para nada cosa suya, propone a Odile que se vayan de fin de semana. Ella acepta, lo cual lo sorprende mucho.

Estructurado en tres breves partes – viernes, sábado, domingo -, este fin de semana pasado con Odile será marcado por el fracaso de Alain Lesec – fulminado en plena acción por el vuelo ruidoso de un mosquito voyeur. Luego será el lunes, por fin, y todo vuelve a lo normal. Pero, ¿ qué ha pasado exactamente ?

Una escritura clínica, una mirada irónica, personajes que tenemos la impresión de ver de tan realistas como se los presenta, un ligero suspense y una pizca de amargadura ; tales son los ingredientes que componen esta breve novela de nuestra época.