¿Vemos transformarse el paisaje a nuestro alrededor? ¿Vemos crecer a nuestros hijos? Esto sucede muy lentamente, y necesitamos alejarnos y reencontrarnos para que los cambios sean notorios.

Este libro nos ayuda a tomar conciencia de la evolución, o cambio radical, de los lugares familiares que nos rodean, a entender lo que ha pasado desde hace un siglo y a presentir lo que serán nuestros paisajes en un futuro. Con mucha maestría, el autor describe la invasión de nuestros espacios por los automóviles, los paneles de tráfico, las bandas blancas y las rotondas; nos muestra nuestro frenesí por la seguridad, que hace crecer los muros en los pueblos del Sur y derrumbarse los setos en Normandía. Nos lleva a la punta de Bretaña, donde un hotel fue borrado del mapa sin que nadie se diera cuenta; al extrarradio parisino, donde el paisaje cambia tan rápido que perdemos cualquier referencia; al parque regional del Pilat, preocupado por los árboles que invaden las praderas abandonadas y tapan su cielo.

El libro contiene un centenar de fotografías, algunas realizadas por grandes fotógrafos, como Raymond Depardon, Sophie Ristelhueber, John Davies, etc., y que provienen de sus colecciones personales, pero también del Observatorio fotográfico nacional del paisaje y de los observatorios fotográficos regionales. Casi siempre organizadas en series, estas imágenes permiten ver enseguida la evolución de un mismo lugar en distintas épocas.

Sin pretender ser un tratado exhaustivo del paisaje, este libro nos ayuda a tomar conciencia de la evolución de los paisajes gracias a numerosas y amenas anécdotas. Contiene un centenar de fotografías, entre otras de Raymond Depardon, Sophie Ristelhueber, y John Davies.