El narrador de este cuento contemporáneo es un abogado de 35 años. Trabaja en Luxemburgo para un bufete importante. Sueldo fantástico. Ninguna novia. Ningún amigo. Una asistenta... a la que nunca ve. Se siente mal consigo mismo, insignifcante, transparente. Este malestar es el que Pascal Janovjak nos describe con todo detalle. Durante una estancia en París, el abogado siente un dolor inexplicable en el cuello, y luego en el brazo. En su habitación de hotel, se a cuenta de que se ha vuelto completamente invisible. ¡Como el héroe trastornado de H.G.Wells! Huellas húmedas en la moqueta, un hueco en un colchón, es todo lo que queda de él. A partir de entonces decide viajar, buscar aventuras sexuales fáciles. Vaga, siempre invisible, desde Cerdeña hasta una región desconocida. Impune, se permite de todo y, liberado de sus angustias, se interesa por una humanidad que pensaba dominar desde muy arriba.